Enviado por Salvador Martínez.-
La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) será la vía para enfrentar, y en su momento transformar, a la Organización de Estados Americanos (OEA) en una agrupación de naciones más autónoma.
Este 18 de septiembre se llevó a cabo en México, la VI cumbre de la CELAC, que reunió a 17 naciones de Latinoamérica y el Caribe representados por sus jefes de estado y/o gobierno, oportunidad para unificar criterios y conformar un frente sólido ante los excesos y abusos cometidos por la OEA.
Especialmente, durante la secretaría general a cargo de Luis Almagro desde el 26 de mayo de 2015, ha existido una gran intromisión en los asuntos internos de los países latinoamericanos, ordenados por Washington.
Por ello, el Secretario de Relaciones Exteriores de México, Marcelo Ebrard Casaubón, ha manifestado que durante este encuentro de la CELAC, los mandatarios de la región elaboraron una propuesta para Estados Unidos y Canadá, para remplazar a la OEA por otro organismo regional realmente solidario.
En este encuentro cumbre, México, no sólo tuvo la presidencia “pro tempore”, sino que alcanzó un verdadero liderazgo regional.
Presentes, el mandatario argentino Alberto Fernández, el cubano Miguel Díaz-Canel, el costarricense, Carlos Alvarado, el ecuatoriano Guillermo Lasso y el uruguayo, Luis Lacalle, ente otros Jefes de Estado.
Esta VI cumbre de la CELAC, fue una de las más trascendentes pues podría ser el principio del fin para la OEA, agrupación de países que desde su origen ha estado bajo los designios de Estados Unidos y sus distintos gobiernos transcurridos.
La Sorpresa
Sin lugar a dudas, la sorpresa de la CELAC fue Nicolás Maduro, pues no estaba confirmada su asistencia, y por la tarde había llegado su vicepresidenta, Delcy Rodríguez, en su representación.
Sin embargo, por la noche comenzaron los rumores en redes sociales de que el mandatario estaba en un avión rumbo a México.
“Cuatro años sin hacer la Cumbre de la CELAC, así que es una oportunidad para relanzarla. Nosotros traemos un conjunto de propuestas importantes para construir una nueva institucionalidad. Ya le escribí al Presidente López Obrador haciéndole una propuesta, que es crear una secretaría general de la CELAC y designar un secretario general con sede en México”.
Maduró aterrizó en la Ciudad de México el viernes en la noche, donde fue recibido por Maximiliano Reyes, subsecretario para América Latina y el Caribe de la cancillería.
El presidente Andrés Manuel López Obrador, inauguró la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), en la que participan más de una decena de mandatarios de la región, con el llamamiento a que la región construya algo parecido a la Unión Europea (UE).
En su mensaje de bienvenida, el presidente López Obrador, destacó la necesidad de “construir en el continente americano algo parecido a lo que fue la comunidad económica que dio origen a la actual Unión Europea”.
“Este ideal sería posible, si se llega a acuerdos sobre tres cuestiones básicas: la no intervención y la autodeterminación de los pueblos, la cooperación para el desarrollo y la ayuda mutua para combatir la desigualdad y la discriminación”.
En cuanto a lo económico y comercial, el mandatario mexicano propuso la firma de un acuerdo entre los países de la región con Estados Unidos y Canadá, con el objetivo de fortalecer el mercado interno del continente, el cual, dijo, “es deficitario con Europa y Asia”.
Destacó la importancia de reactivar pronto la economía de los países de la región “para construir en América lo que consumimos” y resaltó que se cuenta con la fuerza de trabajo, además de un buen desarrollo tecnológico.
“Somos un continente rico en recursos naturales, con amplia diversidad cultural, y las distancias entre países permiten ahorrar en fletes y existe suficiente demanda de mercancías”.
México ha mantenido una tradición de solidaridad con la Revolución cubana, hoy desaparecida y tratando de mantener legitimidad en la figura de Miguel Díaz-Canel, quien a diferencia de Raúl y Fidel Castro, no luchó por el poder, sino que lo obtuvo por lambisconear a los líderes históricos.
AMLO trata de asumir una figura de liderazgo al pedir el fin del bloqueo a la isla, cuando nuestro país tiene su propio bloqueo para los centroamericanos a quienes maltrata y mantiene en condiciones infrahumanas en el sureste del país.
Los Presidentes
Por su parte fue clara la inconformidad de los presidentes de Paraguay y Uruguay en contra de la presencia de Nicolas Maduro mandatario de Venezuela.
El mandatario paraguayo, Mario Abdo Benítez, había advertido que su Gobierno no ha cambiado de postura respecto a Venezuela, con la que rompió relaciones tras reconocer a Guaidó cuando se autoproclamó presidente en 2019.
“Mi presencia en esta cumbre en ningún sentido ni circunstancia representa un reconocimiento al gobierno del señor Nicolás Maduro. No hay ningún cambio de mi Gobierno y creo es de caballeros decirlo de frente” fueron las palabras que sostuvo y pronunció en su intervención, Mario Abdo Benítez.
Por su parte el también mandatario, pero este de Uruguay Luis Lacalle, afirmó que participar en la cumbre de la CELAC no significaba ser “complaciente” con países donde “no hay una democracia plena y se utiliza el aparato represor para acallar las protestas, cuando se encarcelan opositores”.
“Con voz tranquila, pero firme debemos decir con preocupación que vemos gravemente lo que ocurre en Cuba, en Nicaragua y en Venezuela”, comentó en su intervención el mandatario Lacalle sobre las denuncias de violaciones de los derechos humanos.
Le tocó el turno de pronunciarse al mandatario de Venezuela Nicolas Maduro a lo que expuso: “Le digo al presidente de Paraguay, ponga usted la fecha, el lugar y la hora para un debate sobre la democracia en Paraguay, en Venezuela y América Latina, ponga usted, presidente Lacalle de Uruguay, la fecha y el lugar, Venezuela está lista para debatir de lo que haya que debatir de lo que ustedes quieran”.
Atentos estaremos a los posteriores trabajos y conclusiones de esta cumbre histórica.