Editorial
INSAVION
Fuerte fue el golpe para su proyecto de salud del Presidente Andrés Manuel López Obrador con el llamado Instituto de Salud y Bienestar el cual desde su creación nació muerto y tiene más problemas que los mismos seudoderechohabientes.
Nadie tiene la seguridad de cómo funciona, y menos la tienen quienes lo manejan, el descontrol es total y no se sabe que tan costoso puede ser, pues aunque el mandatario nacional se desgañita diciendo que las cuotas son gratuitas, lo cierto es que son bastante caras y más la atención y los medicamentos.
En un afán de que funcione, ha llegado hasta la tontez de amenazar a gobernadores que no son agachones y que le han dejado en claro que no le formarán su loca aventura.
Tal ha sido el fracaso que se ha dado a la tarea inmediata de crear una bola de humo declarando en sus desangeladas mañaneras una tontera más utilizando para ello el famoso avión que no se vende y que tanto ha costado y sigue costando a los mexicanos.
Lo de la rifa nadie se lo cree, por lo inviable, es más, el propio Secretario de Comunicaciones ha dicho que no es cierto, lo cual confunde más a la gente.
Empezamos mal el año, con la salud sin solución, la economía en caída libre, la seguridad peor que nunca y ahora con más ocurrencias y mentiras del Presidente de la Republica que ya no encuentra la puerta y su aceptación también se tambalea…al tiempo