Enviado por Miguel Ángel López.-
¿Por qué es tan incómodo para el presidente el nombre de Ricardo Monreal?.
El senador por Zacatecas significa el némesis de su proyecto transexenal, su viejo sueño de pasar a la rotonda de los hombres ilustres a lado de Juárez o de Madero.
Monreal posee uno de los olfatos más agudos de la selva política; hombre abierto al diálogo sin ser considerado de extremos, alimentado de la necesaria carga intelectual que años de academia y
UNAM le han dotado.
Veo los paralelismo con el pasado, hoy, Monreal está tomando una ruta similar a la de Cuauhtémoc Cárdenas, quien fue bloqueado por el PRI de los 80s.
Cárdenas en su momento fue víctima de un monumental fraude con todo y la caída del sistema, pero antes, la llamada nomenclatura priista se encargó de desatar negras campañas en contra de los suyos.
Aquel sistema fue brutal en contra de Cárdenas, pues no permitirían que ganara el de Michoacán. La historia ya la conocemos, el mismo Manuel Bartlett de ayer fue el que “engrasó” la imposición, repito: IMPOSICIÓN de Carlos Salinas de Gortari.
¿Monreal es el nuevo Cárdenas para el 2024?. ¿De qué lado de la historia estará pensando quedar el presidente López Obrador?.
El senador es la figura multicitada del momento por parte de decenas de columnistas, su ficha comienza a ser compartida en todo tipo de corrillos y mesas de café.
Monreal y sus batallas por hacer valer el mínimo respeto a las reglas democráticas de su partido le han venido como multivitamínicos para resistir la enfermedad del Maximato que se pretende implantar en el país.
Ante la ausencia de figuras de peso en la banca de la oposición, la presencia de Monreal se va posicionando como la opción que más pesa para el 24, un político serio que es bien visto por los miles de electores que arrastran frustraciones y enojo por lo que se vive en el país.
Claro que en los planes del mandatario, pero sobre todo, el de muchos ofrecidos es evitar que Monreal crezca más, tal es el caso del gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, un bufón que avergüenza al buen linaje de políticos que ese estado ha visto nacer.
El intento de descontón de García al ordenar encerrar a José Manuel del Río Virgen, bajo el fantasioso argumento por un delito inexistente ya se hizo notar, pues este desastre ha obligado a que el gobernador Cuitláhuac, derogue el estúpido castigo por “ultrajes a la autoridad”.
José Manuel del Río, tal y como lo hemos advertido saldrá pronto de la cárcel y Cuitláhuac tendrá que irse a esconder detrás de las faldas de su amiga y protectora Rocio Nahle, Secretaria de Energía.
El senador Monreal va sumando muchas simpatías tanto del ala independiente de su partido como de los huérfanos de la oposición.
La hora de Ricardo Monreal está por definirse y aunque desde Palacio Nacional sigan toreándolo, este no responderá el embate, el experimentado Ricardo Monreal, esperará hasta que el autor intelectual de los ataques en su contra termine por desnudarse a sí mismo.