Revista Top Secret – El Semanario de Coahuila – Editorial 1599

4 diciembre, 2023 en

 

 

Editorial

Elección 2024

Todo iba muy bien en la alianza derechista integrada por el PRI-PAN-PRD, hasta que se dio a conocer que el Tricolor salió beneficiado en la negociación frente a los panistas, que han marcado la línea en la carrera por la presidencia y la capital en las elecciones de 2024.

El malestar y la desbandada de miembros del PAN-PRD, se siguen dando por el reparto de candidaturas al Congreso, donde  el PRI se ha impuesto como el gran ganador en las negociaciones de la alianza derechista.

Saben que el PRI, es  el partido más desprestigiado y corrupto de México y otorgándoles más candidaturas a priistas, la debacle de esta alianza opositora va rumbo al despeñadero donde una elección que se veía muy cerrada, ahora se ve completamente perdida

El PAN, que ha llevado la voz cantante de la oposición en la carrera por la presidencia y la Jefatura de Gobierno de Ciudad de México, al colocar a Xóchitl Gálvez y a Santiago Taboada en la boleta de las elecciones de 2024. El PRI, será el que lleve la batuta en la batalla por el Legislativo, algo difícil de lograr, más bien se trata de asegurar su supervivencia política.

El Senado se integra por 128 legisladores: 64 escaños se eligen por el principio de mayoría relativa, 32 se asignan a la primera minoría (el segundo lugar en la elección) y los 32 restantes por representación proporcional.

Cada partido o coalición registra una lista con dos fórmulas, con un candidato propietario y un suplente cada una. El partido que obtiene más votos consigue dos senadurías, mientras que el que queda en segundo lugar, sólo una. A partir de ese punto empiezan las estrategias.

El PRI podrá colocar a dos candidatos -en primera y en segunda fórmula- al Senado en Campeche, la tierra de su líder nacional, Alejandro “Alito Moreno”. También tendrá dos aspirantes en Coahuila.

En el cálculo priista, esas son las dos entidades en las que consideran que tienen más posibilidades de hacerse de un lugar en la Cámara alta. El tricolor también logró colar a sus candidatos en las listas para la primera fórmula en varios estados del País. Esto quiere decir que, incluso si queda en segundo lugar en esas contiendas por el Senado, podría aspirar a tener al menos un representante en el Senado como primera minoría.

En total, el PRI tiene 14 posiciones en primera fórmula y el PAN sólo 13, aunque actualmente hay casi el doble de senadores panistas (19) que priistas (10). Los panistas ocupan el primer lugar, para aspirar a hacerse de un lugar incluso si terminan en segundo lugar en otros estados.

El Partido de la Revolución Democrática (PRD), el socio minoritario de la coalición, se tendrá que conformar con tres postulaciones en primera fórmula.

En la Cámara baja, la coalición derechista, competirá como un solo bloque en 253 de los 300 distritos electorales. El PRI podrá colocar a 96 candidatos, solo dos menos que el PAN, quien tiene actualmente 79 diputados, el PRI, sólo 49.

Ese es el precio que la dirigencia de “Alito” Moreno ha impuesto a sus socios para competir juntos el próximo año. El reparto también da una idea de cuáles legisladores opositores podrán aspirar a reelegirse y quiénes tendrán que buscar otro cargo o, simplemente, ceder el espacio.

Al margen de la presidencia y las nueve gubernaturas, el Congreso se perfila como una batalla crucial en 2024. López Obrador ha puesto en la mira concretar el llamado “Plan C”: obtener una mayoría calificada en ambas cámaras para garantizar la aprobación de reformas constitucionales y la gobernabilidad de Claudia Sheinbaum.

El tablero político y las estrategias electorales siguen tomando forma a seis meses de que los mexicanos acudan a las urnas.

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