El semanario de Coahuila
Editorial
Sorteo
Pues se llegó el día del sorteo del avión presidencial, y al escribir éstas líneas estamos en la víspera del evento, un evento a todas luces fraudulento, porque si fuera cierto el propio Presidente hubiera comprado con “su dinero” al menos un cachito de la lotería y participar.
bueno, no tiene necesidad de comprar ningún cachito, después de todo se va a quedar con el casi 40% del boletaje, pues aún y cuando más de la mitad de los boletos comprados han sido acomodados en calidad de “a fuerzas” entre funcionarios de alto nivel y burocracia baja, lo cierto es que las fallidas estrategia de venta, como el caso de los empresarios, dejaron muy mal parado al Presidente.
Ya se habló hasta el cansancio de lo que se va a realizar con “las ganancias” que dicho sea de paso no son muchas, pues lo que se quiere es salir “Tablas” con el dinero que se tiene que entregar y lo que se ha recaudado, aunque para ser francos, el propio gobierno tiene amplias posibilidades de llevarse uno o más premios, pues tiene en su poder un buen porcentaje de boletos no vendidos.
A partir del día 16 de septiembre, el avión seguirá donde mismo, en el mismo hangar, sin venderse, y seguirá provocando gastos millonarios al pueblo bueno de México, y al malo también, porque la idea no fue en realidad deshacerse del avión, sino quitarle su dinero a muchos ciudadanos y seguir con la pantomima del lujo de los faraones, y con el tiempo, tal vez se vuelva a rifar, pero sin entregarlo, conste.