El semanario de Coahuila
Editorial
Migrantes
Al sentir de los mexicanos, nuestras opiniones son encontradas al hablar del tema de los migrantes, una caravana de miles de gentes hondureñas que al paso de varios países se les han venido sumando contingentes distintos que han aumentado el número de marchantes con un destino final: Llegar a los Estados Unidos y tener una mejor calidad de vida.
Sin embargo, la realidad es muy diferente, ya vista desde un ángulo parcial y no augura nada bueno, al menos para México que está a un paso de enfrentar un conflicto internacional con nuestros vecinos del Norte.
Una cosa es segura, la caravana de migrantes bajo ninguna circunstancia entrará en territorio norteamericano, igual ya no están en condiciones de regresarse a su país y serán el gran problema para nuestro país si no es que ya lo son.
Por principio de cuentas ya las cosas no marchan bien diplomáticamente con los Estados Unidos y el presidente Trump ha ventilado amenazas que nos afectarían directamente, principalmente a quienes vivimos en los estados fronterizos.
Problema de aquel lado y problema de este también, porque aquí en la frontera mexicana se concentrará todo ese ejercito de migrantes sin trabajo, sin salud y con un status completamente ilegal, miles de familias que buscarán a toda costa sobrevirar de la manera que sea y al precio que sea.
Estaremos en unos días invadidos por un mundo de gente diferente, mucha gente tal vez trabajadora y de buenas intenciones, muchas otras delincuentes y con propósitos oscuros para nuestras comunidades
El presidente electo Andrés Manuel López Obrador no tiene que opinar nada, su voz carece de respaldo legal, aquí el único que tiene que solucionar el problema a la voz de ya, es Enrique Peña Nieto, sin que le tiemble la mano y apegado a derecho, esto no es cuestión de humanidad, es una invasión a nuestro territorio nacional.