*Hay confianza en el sistema de seguridad
que opera en Coahuila, sin embargo la gente
tiene miedo natural, por las imborrables
imágenes que imperaron en las pasadas
administraciones estatales.
Por Juan Alberto López Sandoval.-
Saltillo, Coah.- El pasado lunes 29 del presente mes, el Fiscal General del Estado de Coahuila Gerardo Márquez ofreció una rueda de prensa a raíz de los lamentables sucesos ocurridos la semana pasada en la colonia Loma Linda de Saltillo en los que murieron nueve presuntos elementos de un cártel de la delincuencia organizada, tentativamente del Cártel del Noreste como se dijo.
Aunado a ello se sumaron echo delictivos del mismo corte ocurridos el mismo fin de semana pasado en las inmediaciones de Monclova y el pasado domingo en el municipio de Nueva Rosita, en donde además se sostiene la versión de que existen amenazas escritas en mensajes que apuntas a las Fuerzas de Seguridad Coahuilenses.
En su intervención, Gerardo Márquez explica que se están llevando a cabo varias líneas de investigación para cotejar los hechos y que las pesquisas van ampliamente sostenidas y avanzadas, además de que se está trabajando coordinadamente con los demás cuerpos de seguridad, principalmente con el Ejército Mexicano.
Ahí, atendió varias preguntas que le hicieron los medios de comunicación, tratando de saber específicamente si la situación de los años violentos en la primera década de este siglo, volverían a repetirse en el estado, a lo que el Fiscal se limitó a decir que se está trabajando arduamente en los diferentes casos pero sin aceptar o negar la pregunta concreta.
Lo cierto es que ya son varios los sucesos que se repiten con el mismo tinte como el enfrentamiento ocurrido en días pasados en Minas de Barroterán sin que a la fecha las autoridades hayan podido emitir un veredicto convincente ni avanzar en sus investigaciones.
La gente sabe perfectamente que en este gobierno federal que recién comienza, los índices delictivos se han incrementado notablemente en todo el país, y que Coahuila no es la excepción, tomando en cuenta que el estado tiene vecinos con amplio índice de violencia.
Coahuila está bastante lastimada por la época de terror que hace pocos años vivió en carne propia, y que con el actual gobernador ha gozado de un período de relativa tranquilidad, misma que se ha visto trastocada en los últimos días.
El miedo vuelve a hacerse presente en la entidad, es inevitable, aunque las autoridades digan que se está trabajando en los diferentes casos y que no se permitirá que la violencia regrese, lo cierto es que el temor es real y sostenido, pues aunque haya confianza en los cuerpos de seguridad, la desconfianza sigue presente y la gente ya tiene miedo de salir a las calles o al trabajo… hay miedo en Coahuila y se percibe en el ambiente.