El semanario de Coahuila
José Antonio Meade…Con su carácter sereno, prudente y educado, aprieta el paso.
Enviado por Néstor Ojeda.–
El carácter sereno, prudente y educado de José Antonio Meade le genera mucha angustia a quienes lo quieren ver “echado pa’lante” y aseguran que “no levanta” o “no conecta”.
Sin embargo, otros afirman que precisamente el electorado moderado lo que busca es una opción alejada de los candidatos radicales de derecha o izquierda y de los populistas.
En medio de este debate, el precandidato de la alianza PRI-PVEM-Nueva Alianza se metió de lleno a los temas que más le pesan a su partido, al Gobierno Federal y a muchos gobiernos estatales y municipales: la corrupción y la impunidad.
El ex secretario de Hacienda llamó a los partidos y al Congreso de la Unión a poner ya en marcha el Sistema Nacional Anticorrupción y para ello estableció seis propuestas específicas y además hizo una alusión directa a la amnistía a narcotraficantes que plantea Andrés Manuel López Obrador al afirmar que la vía no es perdonar a los delincuentes, sino construir instituciones que vayan más allá de quien ocupe la Presidencia de la República.
Por eso planteó un acuerdo para que sean ya nombrados los fiscales general y anticorrupción y los magistrados del sistema, aprobar el nombramiento del auditor de la Federación, independizar al Ministerio Público aprobando la ley orgánica de la Fiscalía General de la Nación, homologar los protocolos de operación de los Ministerios Públicos locales y reformar las leyes de contratación de obras y servicios en los gobiernos para reducir los espacios que permiten que se cuele la corrupción.
Así, se ve que en su estilo, Meade y su campaña comienzan a imprimir presión en la agenda político-electoral y también Enrique Peña Nieto, quien hace unos días abrió fuego contra López Obrador y Morena cuando de plano dijo en un acto público que “perdonar a criminales” es perdonar a México, lo que en un principio respondió de manera iracunda y exigió al mandatario “respetar la investidura presidencial” y “no intervenir en el proceso electoral”, pero 24 horas después le cambió el tono y decidió utilizar la burla para responder a Peña.
Y el que también reaccionó, pero contra Meade fue Ricardo Anaya, quien acusó el golpe porque precisamente utilizó el torpedeo contra la designación de los fiscales general y anticorrupción para enfilar baterías y ganar reflectores en los meses previos a su virtual designación como candidato de la coalición PAN-PRD-Movimiento Ciudadano.
El caso es que por primera vez, Meade, su coalición y el gobierno toman la ofensiva y marcan la agenda luego de que López Obrador y Anaya la tuvieran copada prácticamente un año.
Así que ya está, fue lanzado el primer golpe y seguro vendrán más para gozo y tranquilidad de los que estaban esperando que el PRI, sus aliados y su candidato se subieran al ring de la lucha por la Presidencia de México.