López Obrador …en “picada”

AMLO, dos años de repudio de la gente.

-Va en caída libre sin lona de protección

ANMEX: Redacción.- 

Para muestra basta un botón.

Cuántos son para no contarlos?

Por más que lo niegue el Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador, enfrenta previo a su segundo informe, una caída en su popularidad que se ha agravado por diferentes temas.

Uno de ellos el nulo apoyo para los enfermos de cáncer, principalmente los niños, el segundo la forma en que se ha manejado el tema de la pandemia por el COVID-19 y una muestra de ello es que,  procedentes de al menos 22 estados de la nación.

Integrantes del Frente Nacional Anti AMLO, (FRENAAA), mostraron la inconformidad al iniciar una manifestación este domingo en la Ciudad de México con una sola exigencia: su renuncia, esa que tanto cacareó que lo haría al sentir que el pueblo lo exigía, pero que ahora, con las delicias del poder, se niega a aceptar el repudio de la gente.

Lo tachan de traidor.

Esta movilización se llevó a cabo en las inmediaciones del monumento a la Revolución donde ciudadanos de Guerrero, Nuevo León, Jalisco, Guanajuato, Aguascalientes, Chihuahua, Coahuila, Sinaloa, Tamaulipas, Zacatecas, Colima, Chiapas, Michoacán y Nayarit, entre otros, fueron tajantes: informas y te vas.

López Obrador no ha convencido. Una y otra vez sus yerros  se notan mucho; es evidente  el repudio hacia el Presidente de la República y se sintió también durante la gira por Nuevo León donde el Frente de nueva cuenta lo increpó con la petición:

“AMLO vete ya”; qué provocó enfrentamientos con integrantes del Movimiento de Regeneración Nacional durante una visita de Andrés Manuel.

Tamaulipas en contra.

La realidad es clara, López Obrador no tiene credibilidad y está rebasado; ese  es el sentir de la oposición al gobierno de quien encabeza la 4T, debido a la crisis económica que se generó por el coronavirus, que  es histórica, porque  millones de empleos se han perdido y no hay una política pública enfocada a salvaguardar desde empresarios, inversionistas, comerciantes y al sector más desprotegido: los obreros.

López Obrador asumió la Presidencia de la República en 2018 y a su segundo informe se presenta con las manos vacías, sin un proyecto de nación que vislumbre beneficios a corto o mediano plazo.

Es imparable la violencia e inseguridad a nivel nacional, por más que se trate de maquillar los números y para rematar los escándalos de sus funcionarios y familiares.

Basta con ver los videos de su hermano recibiendo dinero en efectivo y el caso Lozoya que resulta peor que una película mal dirigida.

Saltillo hace sentir su presencia.

Todo ello, cuando ha sostenido un discurso anticorrupción, pero en los hechos la realidad es muy distinta, es decir, lo que hicieron gobiernos priistas y panistas si son delito, pero lo hecho por su hermano Pío López Obrador, no.

Pero el Presidente no desiste, él defiende su “cuarta transformación” y asegura que hay recuperación económica y perspectivas positivas.

A Coahuila por ejemplo le sale debiendo, pues ninguno de sus compromisos se han cumplido, hablando desde el carbón en la Región Carbonífera, el acero en la región centro y el impulso a la manufactura en la sureste.

Lo que para él fue la tormenta perfecta y ese anillo al dedo, como calificó la pandemia del coronavirus, simplemente no le dio el resultado que él buscaba; eso sí es muy bueno para buscar distractores que le han servido mediáticamente.

Durango va con todo contra AMLO.

Todo quiere salvar con las becas que, por cierto, se cubre solamente a un porcentaje de estudiantes, otra selección de discapacitados y los adultos mayores hacia quienes enfoca constantemente sus baterías.

Lo niega, pero se engaña sólo. Gobierna con el 53% de los mexicanos en su contra, quienes  lo desaprueban y consideran que su gobierno es una farsa.

No quiere escuchar, no quiere oír y no quiere ver, porque la evidencia lo atemoriza.

Ninguno de sus compromisos los ha cumplido, sus promesas se las ha llevado el viento y hoy por hoy México nada contra corriente,  endeudado, sumido en la pobreza, en la delincuencia y con un sistema de salud que no da para más.

Por si le quedaba alguna duda.