El semanario de Coahuila
Sergio Armando Sisbeles Alvarado.
Redacción.-
Propuso iniciativa de reforma.
México.- Con el propósito de unificar criterios y coordinar esfuerzos en el combate al Covid-19, y a cualquier otra contingencia que constituya una emergencia de salud pública, concepto este último que se incluiría por primera vez en el ordenamiento antes referido, el Diputado Federal Sergio Sisbeles, propuso una iniciativa de reformas a la Ley General de Salud.
“Esta misma reforma establece la responsabilidad de la Secretaría de Salud, órgano ejecutivo del Sistema Nacional de Salud, de elaborar en casos de emergencia de salud pública, un protocolo de prevención y atención, así como coordinar y supervisar su aplicación, para que nunca más, una crisis como la del Covid-19 nos cueste tantas vidas”.
En su intervención el Diputado Federal por el Partido Revolucionario Institucional, Sergio Armando Sisbeles Alvarado, presentó esta iniciativa con Proyecto de Decreto por el que reforma y adiciona diversas disposiciones de la Ley General de Salud, en la Sesión Ordinaria semipresencial, del martes 16 de febrero del 2021.
De igual forma incluyó la presentación de una iniciativa más, para combatir la otra pandemia que padece México desde hace años, y que está colaborando muy de cerca con el SARS-CoV-2, “me refiero a la obesidad y a las enfermedades asociadas a ellas, para cuyo combate propongo reformas a las leyes generales de salud pública y de educación, para atacar frontalmente las causas de la obesidad identificando con toda claridad los comestibles que la ciencia médica ha asociado a estos males, particularmente los que están compuestos en su mayoría por los conocidos carbohidratos simples”.
El síndrome respiratorio agudo severo por Coronavirus-2 o SARS-CoV-2 por sus siglas en inglés, o el Covid-19, como lo conoce la mayor parte de la población, es hoy la mayor causa de muerte en México, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud. México está en mal estado, advirtió el 30 de noviembre del año pasado, la directiva de la OMS, y nos hizo un llamado a tomarnos en serio la pandemia.
Elevó su voz en el Congreso de la Unión.
La situación no ha mejorado y cada día se registran nuevos picos de contagios y muertes. La pandemia está muy lejos de ser controlada. Como es común cuando las pandemias y otras emergencias de salud pública se presentan, el control o descontrol de las mismas depende de la información que se le brinda a la población.
Es evidente que donde no han podido ser controladas, hay desorientación respecto de cómo deben de ser prevenidas y tratadas estas emergencias.
En el caso de México, desde junio del año pasado, el representante de la Organización Panamericana de la Salud, Cristián Morales, señalaba que había cierta confusión en la población respecto del mantenimiento de las medidas de sana distancia, en el marco de los colores rojo y naranja del sistema de semaforización. Hay otros dos ámbitos en los cuales ha habido contradicciones y lagunas informativas, que denotan que algo no está funcionando bien en el combate a la pandemia, y esto es el uso del cubrebocas y la prescripción de los medicamentos adecuados.
Mientras la OMS y científicos como el Premio Nobel mexicano, Mario Molina, habían recomendado el cubrebocas para elevar la protección contra el contagio del Covid, el gobierno federal aún podía en duda su utilidad, incluso, especialistas del Instituto Mexicano del Seguro Social, hicieron llamados a la sociedad sobre la importancia del uso correcto del cubrebocas.
En esta falta de determinación oficial, respecto del cubrebocas, tuvo un papel destacado la omisión del Consejo de Salubridad General, que, como órgano consultivo del sector, omitió proponer al órgano ejecutivo, la Secretaría de Salud, que recomendase el uso obligatorio del cubrebocas.
Resultados a favor de la salud de los mexicanos.
En el contexto de esta confusión y omisión, miles de mexicanos murieron y muchos más sufrieron el dolor de perderlos. Miles de familias quedaron truncas y vulnerables. Es evidente que no existe una rectoría por parte del Estado mexicano, ni una responsabilidad principal del gobierno federal en los casos de emergencia de salud pública, pues ni siquiera está contemplado este último concepto en la Ley General de Salud, ni, por tanto, existe en ella obligación alguna para el órgano ejecutor de este sector, la Secretaría de Salud de tomar el control en tales casos, dictar los lineamientos para todo el Sistema Nacional de Salud y ejecutar las consecuentes acciones.
Es por eso que propongo esta iniciativa de reformas la Ley General de Salud, con el propósito de unificar criterios y coordinar esfuerzos en el combate al Covid-19, y a cualquier otra contingencia que constituya una emergencia de salud pública, concepto este último que se incluiría por primera vez en el ordenamiento antes referido.