La realidad que pesa …y no quieren ver

Gerardo Fernández Noroña.

Redacción.-

Alito Moreno.

Entre la realidad que les azotó en la cara Fernández Noroña y las críticas al interior del Partido Acción Nacional, sin faltar el anuncio hecho por “Alito” Moreno, líder del CEN del PRI, que advirtió que podría sentarse a dialogar con MORENA, hay una gran verdad que se niega a ver los que conformaron la alianza PAN-PRI-PRD: no tuvieron avance; perdieron 12 gubernaturas y no avanzaron en cuanto a las diputaciones federales.

Por más que se laman las heridas y presenten ante la ciudadanía números alegres, el  populismo de López Obrador sigue avanzando y ellos, ni juntos han sido capaces de aterrizar y jamás lo harán porque sigue mandando el gran dedo o lo que es lo mismo, la designación de candidatos grises, opacos, que no despiertan pasión ante el electorado, un electorado por cierto harto de demagogia y palabras vanas.

En un saboreo de su intervención, Gerardo Fernández Noroña se atrevió a decir que lo de la línea 12 del metro fue un sabotaje.

El diputado federal del Partido del Trabajo (PT), presumió la victoria de su candidatura en Iztapalapa y la derrota de la oposición en las elecciones. “les ganamos; les ganamos” dijo en reiteradas ocasiones.

Durante su discurso en la sesión de la comisión permanente, Noroña hizo hincapié en la victoria de Morena en las distintas candidaturas a pesar de lo que, acusó, fue una guerra sucia por parte de la oposición en varios ejes.

“Nos vemos el 6 de junio dijeron. Nos vimos, nos enfrentamos y les ganamos, pueden decir lo que quieran los medios, les ganamos y se los dijimos, a pesar de la compra del voto, de campañas insidiosas, a pesar de un sabotaje en la Línea 12, ahora lo puedo decir con toda franqueza, ni juntos nos ganan”.

De hecho, durante la discusión de la agenda política, los panistas, priistas y perredistas reconocieron la superioridad del partido en el poder, por lo que expresaron su disposición para llegar a acuerdos legislativos, y refrendaron su respaldo al Instituto Nacional Electoral (INE).

Gustavo Madero.

Por esta razón, Gerardo Fernández Noroña restregó a los opositores la advertencia que semanas atrás habían lanzado, de que le quitarían la mayoría a Morena.

Incluso, agradeció al pueblo de Iztapalapa, donde ejerce su cargo, ya que en esa demarcación superó con creces a su oposición al acumular más de la mitad de los votos.

“A mí no se me olvida, como pretenden hacer olvidar, que esa alianza de la derecha quería tener mayoría en la Cámara de Diputados para volver a meterle las uñas al presupuesto”.

Y a sus declaraciones se suman dos exdirigentes nacionales del Partido Acción Nacional (PAN), Gustavo Madero y Damián Zepeda, quienes la víspera de la renovación de la dirigencia, exigieron al dirigente de su partido y los dirigentes aliados hacer una revisión autocrítica de los resultados electorales, pues el bloque opositor no ganó y perdieron el 80% de las gubernaturas en disputa.

“No entiendo por qué nos va a caer bien repetir una y otra vez una mentira, con eso no se va a convertir en realidad”, dijo Zepeda Vidales al señalar que no hubo victoria opositora, pues Morena ganó la mayoría de los gobiernos estatales y aumentó en más de 24 millones de mexicanos la población gobernada bajo sus siglas.

Madero, quien fue protagonista de la contienda interna panista en Chihuahua, en la que la candidata seleccionada fue Maru Campos, demandó reconocer en gubernaturas les fue mal.

“Nos dieron una paliza (y esos nuevos territorios)…les facilitarán la elección del 2024”, expresó Madero.

En la Cámara de Diputados, reconoció, nada cambió en realidad y tiene razón pues Morena ganó el 100% de los distritos federales de Baja California, Baja California Sur, Morelos, Nayarit, Oaxaca, Quintana Roo, Sinaloa, Sonora, Tabasco y Tlaxcala.

Con esos diputados, aunque duela reconocerlo, Morena y sus aliados seguirán aprobando el presupuesto, todas las iniciativas y cambios legales que quieran.

Damián Zepeda.

En un artículo publicado en el Heraldo de Chihuahua con el título: “Los que queríamos frenar a Morena ¡tenemos muy poco de que celebrar!”.

En esa postura coincidió el gobernador de Chihuahua y ex-aspirante a dirigir al PAN, Javier Corral Jurado, quien se separó de los apoyos de la dirigencia de Marko Cortés en Chihuahua y por el contrario, insistió en que formaba parte del equipo del ex-mandatario César Duarte.

“Entre las peores cosas que hay en la política: el autoengaño. En sentido contrario, como cauce para mejorar, la autocrítica.

Este artículo pone el dedo en esa llaga: cómo se están magnificando los resultados de la alianza PRIAN, y en otros casos la distorsión, como autoengaño”.

En tanto, en conferencia de prensa, Zepeda Vidales hizo su balance crítico de los resultados de la elección del domingo para exigir al PAN, al Partido Revolucionario Institucional (PRI) y al de la Revolución Democrática (PRD), integrantes de la Coalición Va por México, “bájenle dos rayas a la autocelebración”.

Morena sólo bajó dos puntos, de 37% a 35% su votación legislativa, pero con esos números conserva su mayoría simple en la Cámara de Diputados.

El discurso principal ha sido que le arrebatamos la mayoría calificada y eso es lo que se quiere justificar para decir que hubo un triunfo, pero esa es una mentira.

“Nos fue pésimo; eran 15 perdimos 13, Morena ganó 12 […] fue la misma votación de 2018, esa es la neta (…) No creo que sirva de mucho autoengañarnos. Hubo tres años de ataques, gritos de un lado y del otro y quedamos tablas”.

Se quedaron en la lona.

Los dos del PAN pidieron cerrar filas y poner lupa para que ningún diputado dé su voto a Morena o sus aliados en la 65 Legislatura, pues si ese bloque logró reformas constitucionales en la presente 64 Legislatura no fue porque cuente con mayoría calificada, sino porque “dobló a la oposición”, pues, logró quebrar al PRD, a veces consiguió apoyo del PRI y hasta de panistas.

Hicieron un llamado a la autocrítica que en 2018 el PAN tuvo 18% de la votación y hoy tuvo 18% de la votación. El PRI tuvo 16% de la votación y hoy tuvo 18% de la votación, avanzó casi 2 puntos y el PRD perdió esos dos puntos.

Lo ilógico es que después de un desastre económico, 10 millones de nuevos pobres, el país sin medicinas, la gente con cero apoyos y hasta una desgracia como la caída del Metro y fallecimiento de personas, no se logró una derrota de Morena.

Además los puntos que perdió Morena no se fueron a la alianza, sino a Movimiento Ciudadano, partido que ganó el gobierno de Nuevo León.