El semanario de Coahuila
Ante la inminente invasión, López Obrador ya no tiene el apoyo ni la confianza de los mexicanos
*Cuestión de tiempo para que los Estados
Unidos invadan México y lo ideal es cerrar
filas con López Obrador…Sin embargo,
por su política de divisionismo entre los
mexicanos, ahora millones apoyan a Trump.
Enviado por Miguel Ángel López.-
Caso LeBarón fue la gota que derramó el vaso
¿Pueden los Estados Unidos enviar sus tropas a México para capturar a un narco o combatir a un cártel de las drogas?.
Sí, en Washington, en la Casa Blanca, hacerlo es ya un mero formulismo, Donald Trump, así lo cree, y aquí nadie debe sorprenderse.
Lo habíamos adelantado en los días posteriores al ataque de la familia LeBarón, los Estados Unidos actuarían de la manera que les convenga para apaciguar a la opinión pública de allá.
Basta recordar la cantidad de encabezados de los medios gringos para notar que la presión se habría volcado a que la Oficina Oval dejase de apapachar a el gobierno de AMLO y diese un manotazo en la mesa, Trump, que trae muchas ganas de quedarse otros cuatro años en la presidencia ha tomado el bate y se dispone a asestarle un golpe en la nuca de las relaciones con México.
A diario López Obrador se ha dedicado a dividir al país, ahora enfrentará las consecuencias
La lógica de una intervención es sencilla: lo harán cuando les plazca, lo han efectuado en medio oriente, han colocado botas y misiles en distintas geografías del planeta ¿por qué no efectuarlo en su eterno patiño del sur?.
Trump es un sujeto que no se tocará el corazón para, dentro del más brutal pragmatismo, lance más que un par de twitters y se decida por una acción más efectista.
Es momento de señalar algo que los mexicanos deberemos llevar a cabo: rechazar de manera unánime toda posible acción militar, policiaca o de cualquier naturaleza intervencionistas de los Estados Unidos en nuestro país.
El gobierno de AMLO debe recibir el respaldo total de todas las fuerzas políticas, de los principales líderes sociales y hasta religiosos, de la sociedad entera, de los opinadores en los medios de comunicación.
Su doble moral lo ha colocado en éste encrucijada
No debemos permitir que en aras de una estrategia electoral, el presidente Donald Trump arroje sus mismas hacia acá, y el gobierno que nos representa tiene nombre y apellido y requiere del acuerpamiento de todo el país.
Aquí no valen las diferencias ideológicas, se trata de darle lectura a un posible capítulo que ya ha sido demostrado en nuestra historia como el punto ciego de los mexicanos, la falta de cohesión nacional.
Más, cuando se trata de la añeja tradición de los Estados Unidos por intervenir en otras naciones, los mexicanos no lo debemos permitir, punto.
Y en el fondo del vaso debemos encontrar que las razones para emitir reclamos más sonoros hacia el norte pasan por el papel de allá y el gravísimo consumo de drogas, de la proliferación en la venta de armas y de la poca autocrítica que en su sistema subsiste.
Trump tiene la mejor oportunidad de reivindicarse con su electorado
Incapaces de ver que México lleva años siendo un lamentable laboratorio de sus políticas económicas y hasta de modelos de violencia.
Vamos, somos una fuente de siembra y distribución de drogas y ellos en mercado de grosero consumo y que para calmar sus conciencias nos envían rifles y municiones para que pongamos muertos y miles de víctimas.
Pero no se trabaja de manera conjunta en atacar las causas que generan el que aquí se den en racimos los criminales y allá, en las corredurías de Nueva York se lleve a cabo el lavado de dinero bajo la bendición de delincuentes de cuello blanco.
¿O que alguien nos explique el por qué cientos de miles de millones de dólares son “purificados” en Wall Street?, dinero que ha sido documentado llega hasta campañas políticas en los Estados Unidos.
El Congreso de los Estados Unidos está por apoyar la iniciativa de Trump al declarar terroristas a los cárteles de México
Y claro que sabemos lo que aquí sucede, lo que durante años hemos padecido, sabemos que hasta le fecha las estrategias para combatir a los cárteles de la droga han dado resultados pírricos.
Además, que para terminar con dicho infierno se deben romper todos los paradigmas, pero ya está demostrado que el tema de narco no será resuelto con la sola declaración de un presidente mexicano y todas sus estrategias.
Vamos, ni Jesucristo mismo podría aplacar a los malos, antes, miles de Judas entregados a la corrupción lo entregarían.
El tema es que se debe hacer en el plano regional, pues hasta este año, el papel de los Estados Unidos ha sido contemplativo, sólo arrojando alguna estrategia como el Plan Mérida.
Seamos honestos, si la voluntad de los Estados Unidos fuese apoyar a México, comenzaría por darle seriedad a el combate en su propio terreno, en donde en el “High School” del Bronx se llega a vender más cocaína que en Tepito.
Los Fifís y las “Ternuritas” se ponen de parte de Trump
Dejémonos de medianías, sumemos la voz al Gobierno Mexicano y que por esta vez, el tal Trump vea que cualquier movimiento para trasladar sus marines le podría costar muy caro.
Esto sería lo ideal, lo más sensato en cualquier país, sin embargo, el sentimiento de los mexicanos está más dividido que nunca, ahora los “fifís”, los “ternuritas” tienden a apoyar a Trump, solo con la idea de golpear a los “chairos”, en medio de una batalla fratricida que impulsó López Obrador mediante sus discursos de odio en presentaciones públicas y mañaneras… el presidente ya no es digno de confianza.