*Quedan pasmados los economistas
mundiales, por la inteligencia y la
iluminación natural que emana de
Gansopoxtli al descartar con una hipótesis
alienígena al FMI y además decir que
no necesita inversión extranjera para
el desarrollo de México.
Enviado por Vladimir Galeana.-
El Fondo Monetario Internacional tuvo la osadía de disminuir las predicciones sobre el crecimiento de México a 0.9%, y eso provocó el enojo del Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, quien convocó al organismo internacional a ver si es lo mismo crecimiento que desarrollo. Textualmente espetó:
“De una vez convocó a los del FMI, a los expertos, a los tecnócratas, a los nostálgicos del neoliberalismo, a que vamos si es lo mismo crecimiento que desarrollo”.
Y para dejar en claro lo que piensa, señaló: “los tecnócratas progresivos dicen crecimiento, ¡pero no! es desarrollo”, remató.
En lo personal me imagino que algo debió haber aprendido el Presidente de la República cuando estudiaba en la Facultad de Ciencias Políticas, porque le tomó tanto gusto a lo que estaba asimilando, que decidió quedarse poco más de 15 años para reafirmar sus conocimientos en la materia.
Asumir una responsabilidad de ese tipo no lo hace cualquiera, lo hacen los predestinados.
Pero eso no lo entienden los funcionarios del Fondo Monetario Internacional, porque son tecnócratas y nostálgicos del neoliberalismo que tanto daño ha causado a este país y que tenemos que desterrar para siempre.
Ojalá que los grandes economistas de la corriente neoliberal se atrevieran a aceptar venir a este país para sostener un debate de altos vuelos con un especialista que se afanó por quedarse muchos años en la escuela para seguir aprendiendo y estar a la altura de la toma de decisiones que requiere un país como México.
Pero sobre todo, porque ese organismo multilateral de marras que se atreve a cuestionar las políticas económicas de la Cuarta Transformación se ha pronunciado por limitar la intervención del Estado en los asuntos jurídicos y económicos, lo que desde luego significa una grave equivocación.
Y claro está que si llegan a venir se encontrarán con la horma de sus zapatos, ya que quien encabeza los destinos de este país, insisto, alcanzó un alto grado de especialización porque se tomó todo el tiempo posible y necesario para terminar su carrera a causa de esas dudas existenciales y esa forma de pensar que ahora lo convierten en un baluarte de los principales gobiernos de América Latina.
Que les quede claro, de ahora en adelante se invertirá la ecuación, porque habrá más Estado vigilando que existan condiciones que permitan incrementar el desarrollo de los pueblos evitando la intervención económica privada, porque ese tipo de capitales solamente pervierten lo que debe ser el desarrollo de nuestros pueblos.
Si los especialistas del Fondo Monetario Internacional quieren aprender, no tienen más que voltear a ver al México que estaremos construyendo sin la ayuda de nadie.
Con este tipo de estrategia todos los mexicanos tenemos que entender que el “Bien Amado Camarada Líder” se echara a cuestas la elaboración y estructuración de un nuevo proyecto de que provocará la envidia de las grandes potencias económicas, ya que no habrá distribución de la riqueza porque no necesitamos eso.
Lo único que necesitamos los mexicanos es estar juntos y asumir nuestras responsabilidades para caminar por el sendero que nos indique quien ahora se ha transformado en la esperanza de México.