Enviado Por: Ulises Rodríguez

El presunto deudor fiscal, Ricardo Salinas Pliego reveló que demandó al ex Presidente Andrés Manuel López Obrador por el supuesto incumplimiento de un acuerdo que, según él, establecía un pago de 7 Mil 500 Millones de Pesos para saldar una parte de su deuda con el Servicio de Administración Tributaria (SAT).
“Tengo demandado al ex presidente por incumplimiento de contrato porque teníamos un acuerdo perfectamente claro”.
“Vino el Procurador Fiscal, vino el Secretario de Gobernación, y en presencia de los dos teníamos un acuerdo y se echaron para atrás”, aseguró en entrevista con el periodista Ramón Alberto Garza.
El dueño de Grupo Salinas mantiene un adeudo de más de 74 Mil Millones de Pesos, monto que se ha convertido en uno de los litigios fiscales más grandes de la historia del país.
La cifra, explicó el propio empresario, equivaldría a cinco años completos de utilidades de sus compañías. Pese a que se trata de más de 30 litigios acumulados en 16 años, el ultraderechista insiste en que el cobro es “excesivo” y acusa al actual gobierno de quererlo “quebrar” porque es una “voz incómoda para el régimen morenarco”.
No obstante, López Obrador desmiente lo dicho por Salinas Pliego. El ex presidente explicó en Marzo de 2024 que, en su momento, se le ofreció al magnate un descuento de 8 Mil Millones de Pesos sobre un adeudo de 26 Mil Millones, pero él rechazó la propuesta.
“Se le planteó y dijo no. Yo hasta descansé porque imagínense la sospecha que iba a despertar ¿por qué el trato preferencial a su amigo Salinas Pliego?”, relató entonces AMLO.

La estrategia del empresario ha sido prolongar el litigio con un ejército de abogados, al mismo tiempo que utiliza su poder mediático para presionar a las autoridades fiscales.
Ahora, asegura que el acuerdo fallido con el ex presidente buscaba “una resolución amistosa” para pagar mucho menos de lo que el SAT reclama.
Mientras tanto, la deuda millonaria está en manos de la nueva Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), que deberá resolver en definitiva si Salinas Pliego paga lo que la autoridad hacendaria reclama desde 2008 o si logra otro revés judicial a favor de sus intereses.
Asegura que el SAT
quiere “quebrarlo”
Ricardo Salinas Pliego, dueño de Grupo Elektra y presunto deudor fiscal, aseguró que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) quiere llevarlo a la quiebra con un cobro que, según él, no corresponde a la realidad.
En entrevista con Ramón Alberto Garza García, el dueño de Grupo Elektra insistió en que está dispuesto a pagar sus impuestos, pero solo “lo correcto”, no los 74 mil millones de pesos que le reclama la autoridad fiscal. Y es que Salinas Pliego aseguró que el monto que le atribuyen equivale a 5 años de utilidades de sus empresas.
Sin embargo, el empresario ultraderechista omitió decir que la deuda total que se le atribuye no es por un solo año de operación de sus empresas, pues tiene litigios desde hace más de 16 años.
En lugar de saldar su deuda o aceptar lo que determinen los tribunales, Salinas Pliego y su defensa han preferido alargar los juicios y dilatar las resoluciones, lo que genera intereses y en otros casos multas.
El también dueño de TV Azteca, aseguró que la realidad es que el SAT quiere «quebrarlo» porque, según él, es una «voz incómoda» para el gobierno, a quien llamó «morenarco».
“¿Por qué me quieren quebrar? Porque soy una voz incómoda para el régimen morenarco”, dijo.
Salinas Pliego intenta darle más peso a su narrativa de «empresario perseguido» acusando que es la propia Presidenta Claudia Sheinbaum quien da línea a los jueces para que fallen en su contra y lo obliguen a pagar sus adeudos fiscales.
“Dónde está el debido proceso, dónde está la presunción de inocencia. Entonces la señora se para ahí en su mañanera y con toda la calma del mundo dice que yo soy un evasor, que debo impuestos y que no quiero pagar, cuando esto es una disputa que no ha sido resuelta”. “Entonces debemos pensar todos los mexicanos que ella tiene la verdad absoluta y que no solo la tiene sino que además se ocupa de hacerles saber a los jueces en qué sentido deben fallar”, señaló.