El semanario de Coahuila
Editorial
Degradación y Muerte
…del Tricolor
Con 94 años de historia el PRI no tendrá candidato propio, emanado de sus filas, en las elecciones presidenciales de 2024, sometido por su dirigencia nacional al apoyo de la candidatura de una militante de su histórico enemigo de la derecha conservadora, PAN.
Carlos Salinas de Gortarí lo hirió de muerte cuando no pudo ganar claramente la presidencia en las urnas en 1988 y recurrió al “golpismo institucional” en complicidad con el PAN creando en los hechos el PRIAN.
En septiembre de 1990 ante la Asamblea Nacional del PRI su entonces dirigente Luis Donaldo Colosio Murrieta dijo: “Vamos juntos a poner punto final a la perversión política de las decisiones cupulares y centralizadas; vamos a poner punto final a la imposición y a la antidemocracia”, destacando además como requisitos de sus candidatos “la militancia, honorabilidad, probidad y capacidad”.
El proceso de degradación del PRI que gobernó de manera ininterrumpida más de 70 años, se aceleró cuando cedió el poder del país al PAN con Vicente Fox en el 2000 y Felipe Calderón en 2006, pero sobre todo, cuando retornó a la presidencia de la República en 2012 con el priísta Enrique Peña Nieto.
Fue cuando aumentó enormemente la práctica cotidiana de la corrupción, el entreguismo, el saqueo de las arcas y el patrimonio de la nación, lo que condujo al hartazgo popular y a que las mayorías se volcaran en las urnas hacia la opción totalmente opuesta, que representaba Andrés Manuel López Obrador.
La tumba del PRI la cavó Enrique Peña Nieto y sus colaboradores con su rapiña. El enterrador, el actual CEN del Tricolor que encabeza Alejandro “Alito” Moreno Cárdenas, quien asumió la dirigencia nacional del PRI, ungido previamente por Salinas, también demasiado cercano a los Claudios X. González, padre e hijo.
La alianza PAN-PRI-PRD que postulará a la panista Xóchitl Gálvez para contender por la presidencia, cuya selección es el certificado de defunción del PRI, sin candidato presidencial propio en 2024. Además está el PRI arrastrando al PAN a la tumba.