El semanario de Coahuila
Editorial
TIEMPO
Todo es ya cuestión de tiempo para el Presidente Andrés Manuel López Obrador, las horas y los minutos son crueles para su proyecto, porque se van más rápido que inmediatamente y la maldita Pandemia que no retrocede y le aniquila sus muy necesarios viajes de proselitismo por toda la República Mexicana.
Con Pandemia o sin ella, López Obrador se lanzará a las calles, a seguir con su perorata ya muy trillada, con ese aseguramiento de que el COVID nos vino como anillo al dedo y que por eso los mexicanos rebosamos felicidad.
Daremos gracias al Coronavirus entonces, porque vamos requetebién, porque tenemos una economía envidiable, porque la seguridad está en sus mejores momentos, porque la Pandemia la domamos de forma contundente y ya no tenemos contagiados, porque creceremos hasta un 6% y porque a final de cuentas el PIB no interesa.
Los mexicanos somos ricos espiritualmente, aunque no tengamos que tragar, y por eso somos felices, y gracias porque los familiares se siguen muriendo por falta de atención y equipos médicos, entonces somos más felices señor Presidente.
Somos felices porque ya no hay ningún feminicidio en el país, y las mujeres que protestan es porque son liosas, por eso usted las mandó a “volar”, por eso no le cayó el “veinte”, por eso y muchas cosas más, estamos ya listos para las próximas elecciones…una cosa nada más: El COVID también va a votar, eso se lo aseguro.